miércoles, 25 de noviembre de 2009

truchas de raza allerana

La Real Sociedad Asturiana de Pesca está convencida de haber encontrado una nueva especie de trucha. Estos ejemplares fueron localizados en un pequeño arroyo allerano y tiene grandes singularidades. Todas comparten una marca de nacimiento situada cerca del ojo derecho. Además, presentan una gran capacidad para mimetizarse con el entorno. Cabañaquinta (Aller),
La Asturiana de Pesca tiene desde hace unos días en su laboratorio de reproducción de Cabañaquinta un valioso tesoro que mantiene a los federativos tan ensimismados como ilusionados. Se trata de una treintena truchas recogidas en un pequeño arroyo que desemboca en el Aller . Sus características rompen con la semblanza hasta ahora conocida de estos animales. El directivo José Cueto asegura que, «casi con toda seguridad», en las balsas de esta instalación chapotea una especie de trucha «hasta ahora desconocida».
Esta misteriosa colonia de truchas ha vivido durante décadas en un ecosistema casi cerrado, en un mundo acotado similar, guardando las lógicas diferencias, con el que muchas películas y libros retratan cuando abordan temas de aventuras imposibles en escenarios perdidos. Ángel García, unos de los encargados del laboratorio de Cabañaquinta, es en este caso el intrépido explorador protagonista de la historia. Hace tiempo encontró un pequeño arroyo en pleno monte, cuya parte superior se encontraba protegida por una salto de agua conformado por una pared de roca. La espesa vegetación apenas dejaba entrever el discurrir del pequeño río, cuya presencia era más perceptible con el oído que con la vista. Tras adentrarse curso arriba, Ángel Baizán se encontró con una importante población de truchas: «Debido a las características del cauce, estaban en una especie de recinto natural cerrado, sin poder salir al exterior», explica. Pronto notó algo extraño. Los solitarios peces parecían mimetizarse perfectamente con el entorno y, cuando los examinó más detenidamente, encontró una particularidad en común: «Tienen una pequeña mancha en forma de T en la cabeza que no aparece en el resto de la especie».